miércoles, 31 de octubre de 2012


Nos ha durado demasiado
esta pequeña crisis
y no se marcha al cerrar la ventana
y no se endulza con nubes de azúcar ni respuestas.
Queremos permanecer en ella
al levantar la cabeza de la redondez del ombligo
queremos ser,
y digo más
quiero ser
esta parte oscura que me eres
ese aire de días impares y lluvia
que eleva bolsas de plástico
y atenúa la maldita prescindencia.

jueves, 18 de octubre de 2012


inmóvil donas al aire tu piel impermeable.
pero igualmente llueve
sobre el patio
sobre los gatos
sobre los charcos ahora cuencos de leche.

 Llueve de ausencia de tus lágrimas,
llueve
sobre los tejados,
los vértices
y los caños sin cuentos ni osos
que pudieran en otro tiempo
restarle a la noche un insomnio.

inmóvil recogida en un ombligo,
deshaces el azucarillo en el té, te calientas las manos.
observas las orillas donde se acumula el agua
volcada por todo el invierno que tú eres.
   Violento inmovilismo
capaz de redondear piedras,
sacrificar peces.

Llueve y quizás no recuerdes
el día en que te saqué a bailar
y llevabas por vestido la primavera
ahora caen junto a las gotas
reminiscencias de ese trazo
descuidado de tus pies,
del rastro de tu olor
golpeando las espaldas de la gente.  

 móvil de grullas que giran en círculos
me sube a la garganta una verdad
tu boca era de tierra 
la mía un brote
pero desahucias las flores, las carícias, los vaivenes
y en el suelo solo quedan los rasguños
de haber arrastrado nuestros sueños como muebles.

jueves, 11 de octubre de 2012

Miriam Reyes


...Primero se me hizo el mundo pequeño
luego yo
me hice tan pequeña como una ciruela
en algún lugar entre las paredes de mi estómago.
Tantas veces bajé buscando trastos viejos a este
sótano
que me quedé dentro
lejos muy lejos de hombres y ventanas.
Aunque quisiera
ya no podría ver nada afuera.

domingo, 7 de octubre de 2012

Ángela Botero L.



Alguien fuerte
debería venir
a abrazarme
como si yo fuera
toda su vida.
Como si yo fuera
la única razón
de su existir.
Sólo eso,
nada más.

viernes, 5 de octubre de 2012


El sexto amor o el endecasílabo
El soul, el jazz, el blues
Y esa blusita azul de mil botones
Unas manos grandes
Que desandan por las ramas.
La risa desatada
Burbujas de saliva entre tus pequeños dientes.
Un nuevo yo en tercera del plural
un remolino en el ombligo
un parpadeo, un silencio
esa taza roja donde apoyas los labios
cuando cae en el cielo la mañana.
El pelo suelto
el terco deseo de ser siempre hoy.

El séptimo amor o el dodecasílabo.