domingo, 1 de diciembre de 2013

Si pudiera reventar. BOOM. Que alguien me hiciera un alunizaje, eso sería espectacular. Millones de microcristales de mi cuerpo hechos luz. Minúsculas moléculas de mí bajo los zapatos de los transeúntes, átomos de esa sentencia cárnica indiscutible esparcidos por la acera, dominados por el devenir del azar. 
 Entonces, quién sabe, quizás viajar como se viaja cuando te quedas dormido y de repente te despierta una película porno en el televisor o una balada que te recuerda el día de lluvia en el que alguien siguió triste después de las doce. 
O quizás perderlo todo y que solo queden ventanales grises y tubos de aire acondicionado y  ramajes boca arriba de árbol inconsciente. Y nosotros. 


Me pirra la idea.



No hay comentarios:

Publicar un comentario