no nos movemos del terror y la delicia,
y sus verdugos delicadamente nos arrancan los párpados
para dejarnos ver sin tregua
cómo crecen las plantas del balcón,
cómo corren las nubes al futuro.
¿Qué quiere decir esto?
Nada, una taza de té.
No hay drama en el murmullo,
y tú eres la silueta de papel
que las tijeras van salvando de lo informe:
oh vanidad de creer que se nace o se muere,
cuando lo único real es el hueco que queda en el papel,
el golem que nos sigue sollozando en sueños y en olvido.
(recuerdos de princesas)
No hay comentarios:
Publicar un comentario